España logra la excelencia de la mediocridad.

Se ha publicado el Informe Pisa de este año y de nuevo España está justo en el lugar en el que nuestros políticos desean que esté y para lograrlo han invertido ingentes cantidades de dinero, por ello podría decirse que en educación se ha logrado plenamente el objetivo planificado que siempre ha sido y creo que será el de alcanzar la excelencia de la mediocridad.

En España, desde hace años, se considera muy feo destacar, querer aprender dejándose de zarandajas, buscar ser mejor en el estudio, aquí lo importante es el igualitarismo, todos iguales, todos igual de burros. Los mediocres están muy bien mirados, pasar de mediocre es meterse en zona de peligro, seguir de mediocre es garantía de éxito subvencionado, y eso sí, para conseguirlo hace falta invertir mucho dinero en la enseñanza, la mediocridad solo se consigue con dinero en abundancia, se ha demostrado que se consiguen más burros con ordenador que con lápiz y papel, por tanto ordenadores para todos.

Por todas partes del Informe Pisa se repite, como dice el editorial de El País que “Como en anteriores ocasiones, y a partir de un cierto umbral de gasto en enseñanza, no se aprecia una correlación entre este y resultados obtenidos”, pero eso es aquí una herejía. Jamás nunca se ha oído en España hablar de mejorar la educación sin que a continuación no llegase la exigencia de más dinero.

Han politizado la enseñanza y tenemos lo que buscaban con esas políticas, zopencos a mansalva, no nos podemos quejar salvo por un motivo, estoy convencido de que se podría conseguir la misma o mayor cantidad de zopencos cargados de mediocridad con la mitad de dinero. En el Informe Pisa ocupa el primer lugar en las tres áreas analizadas, comprensión lectora, competencia matemática y competencia científica, la ciudad china de Shanghái, con 19 millones de habitantes y con un ratio de 45 alumnos por aula y sin ordenadores, solo lápiz  papel.

Aquí nos quieren convencer de que la única forma de mejorar es conseguir como máximo un ratio de 7 alumnos por aula o menos, y me huelo que se busca la perfección intentando logar un ratio de cero alumnos por aula, solo así tendría tiempo el profesor para preparar sus clases como es debido.