Cancún: se acojonan porque acojonan poco climáticamente.
La gran cumbre del clima que se celebra en el marco incomparable del Cancún de 5 y 6 estrellas anda enfebrecida porque están descubriendo que los buenos tiempos aquellos en que acojonaban al más pintado con sus catastrofismos milenaristas han pasado a peor vida y ahora son los acojonadores climáticos los que andan acojonados porque no hay forma de acojonar al personal, y claro, el negocio peligra. Menos mal que ZP sigue convencido de que tirar el dinero en los bolsillos de los mangantes del calentamiento climático del cambio global es lo mejor para salvar el planeta.
Japón, Canadá y Australia ya han dicho que no harán más el primo, algo es algo. Y es que es una gran pena el hecho de que ninguna isla del Pacífico haya desaparecido bajo las aguas, algo que habría dado realce a la cumbre. Es también una desgracia el que el falso número de muertos al año por el cambio climático sigan siendo los mismicos 300.000 que hace más de diez años. Son tan burros que ni siquiera son capaces de decir hoy que los muertos, falsos por supuesto, son 312.345. Porque uno no se traga que en 2010 vayan a morir trescientos mil, que en 2009 muriesen justo 300.000 ni uno más ni dos menos, que la misma y exacta cantidad en 2008, y es que esa cifra de 300.000 muertos al año por culpa del cambio climático es el mejor ejemplo de las falacias del cambio climático.
El chollo se acaba, y lo saben, ya deben estar preparando la nueva catástrofe planetaria que por supuesto originará la maldad del hombre humano porque eso de andar de Bali a Copenhague y de ahí a Cancún a gastos pagados es algo a lo que no se puede renunciar, y más si las dietas dan para suripantas de alto standing. Ahora toca el impacto de un asteroide o la gran glaciación o la masiva erupción de mil volcanes o el decenio de los tsunamis asesinos o la década de los vientos letales. Algo se les ocurrirá.
0 comentarios