Mandemos a ZP a Islandia o se irá de rositas.

Leo en los periódicos que el ex primer ministro islandés Haarde está siendo juzgado por su responsabilidad en la crisis sufrida por el país y se le acusa, agárrense, de desoír las advertencias sobre una inminente crisis.

Aquí tenemos un presidente del gobierno que no solo desoyó las advertencias sobre una inminente crisis sino que la estuvo negando durante muchos meses, ocultando el problema, actuando justo en sentido contrario, tirando dinero a espuertas, endeudándonos hasta las cejas y más arriba, y mintiendo a mansalva meses y meses.

Nuestro problema actual es la presión asfixiante de la deuda, el riesgo casi asegurado de que dejen de prestarnos dinero y si nos lo prestan debemos pagar intereses elevadísimos. Necesitamos dinero para pagar el dinero que debemos y puede que no lo tengamos. Si no se hubiese endeudado ZP del modo en que lo hizo otro gallo nos cantaría.

Andan por ahí haciendo ya números sobre lo que le ha costado a España ZP. Medio billón de euros, o lo que es lo mismo, Zapatero nos ha costado 83 billones de pesetas. Dicen los redactores de ese estudio algo que le pone a uno las escarpias como pelos de gallina: “Si el presidente no hubiese disparado el gasto público entre 2003 y 2007, España gozaría hoy de un superávit del 1,3% del PIB.”

Y en Islandia juzgando al homónimo de ZP por desoír las advertencias sobre una inminente crisis. Hay que joerse, porque este se nos irá de rositas después de hundirnos en zonas abisales (PL) de las que salir nos va a costar años.

Digo yo, qué menos que ZP se vaya ya y renuncie a su pensión presidencial y al momio que le toca para dar de comer a un montón de familias durante un montón de meses o crea algunos empleos.