El PSOE adalid de la objetividad, como la Pompadour de la virginidad.

El dogma progre número 14 establece y proclama urbi et orbi que “Para las mujeres y mujeros de progreso y con valores de izquierda, la objetividad será siempre lo que establezcan nuestras subjetividades y quien diga lo contrario estará manifestando una patente falta de objetividad”. Sabido eso, no extraña ya nada ver lo que está pasando con el más grave problema que está acogotando a los españoles.

Hace ya muchos días que comenzó el grandioso espectáculo progre con valores para desviar la atención del costalazo del PSOE y de la que está cayendo. La base que fundamenta las argumentaciones para montar el numerito del despliegue de esa gigantesca cortina de humo, son las gravísimas palabras que aparecen en Diccionario Biográfico Español, sobre todo las que califican al régimen franquista de autoritario y no totalitario.

El proceso es el de siempre, primero salen los medios de la progresía poniendo el grito en portadas y editoriales, rasgándose las vestiduras con alharacas sin cuento. Una vez señalizado el objetivo vienen los chicos y miembras del PSOE en el Congreso y plantean al gobierno del PSOE, vía proposición no de ley, la necesidad de prohibir la difusión de la obra. En la página oficial del PSOE nos cuentan la historia y dejan claro los porqués de semejante furor uterino censor.

Y aquí es donde entra el dogma progre número 14, ya que nos insisten en que el tiberio que montan está justificado en la “falta de objetividad” del Diccionario Biográfico. Y hay falta de objetividad porque los medios progres han dicho que hay falta de objetividad y vale ya.

Aunque a mí me da la risa floja, pues ver al PSOE predicar la objetividad siempre me trae a las mientes la imagen de la Pompadour predicando la virginidad.

Pero al menos sabemos que lo muy mucho más peor que está pasando en España es eso de la cosa de Franco autoritario, con lo que si uno se lo piensa puede llegar a la conclusión de que si eso es lo peor podemos irnos a dormir tranquilos y pensar en las vacaciones sin preocuparnos de más.