Trajes, vestigios y faisanes.
Este es el daguerrotipo del país. Tres puñeteros trajes regalados a un puñetero político tienen miles de veces más relevancia mediática que la desaparición de miles de pruebas del asesinato de casi 200 personas o el chivatazo a unos etarras para que huyan hecho por policías de alto nivel de Rubalcaba.
Si Camps debe ir a la cárcel por los trajes, que se le meta ya mismo, pero eso sigue siendo una minucia irrelevante al lado del chivatazo a ETA por parte de un alto funcionario de la policía de Rubalcaba o de la desaparición de las pruebas de los atentados del 11M. No obstante aquí importa lo de Camps y lo del 11M y del Faisán no existen.
Paso del color político del tío de los trajes y de los responsables de los otros dos asuntos. Si se sopesan se ve que este es un mundo al revés, y tragamos. Y así nos va con todo.
Este es el país donde hacer montañas de granos de arena y granos de arena de montañas es el deporte mediático nacional.
La juez Coro Cillán está interrogando a muchos tedax sobre la desaparición de pruebas y vestigios de las explosiones del 11M. Están saliendo a la luz datos espeluznantes, pero eso no importa, lo que importa son tres mierdas de trajes y repito, porque la gente es muy rara, que si hay que meter en la cárcel a Camps que vaya ya mismo, pero eso no hace a los tres trajes algo de relevancia, y menos comparable con lo que se oculta de lo trascendente.
Busquen noticias sobre lo que está ocurriendo en el juzgado con la causa contra Sánchez Manzano, jefe de los Tedax, imputado de la desaparición masiva de pruebas del atentado del 11M, no las encontrarán prácticamente en ningún telediario ni medios importantes, pero los trajes se los meten hasta en la sopa de marisco.
Seguirán dándonosla con queso y bien merecido lo tenemos.
0 comentarios