¡Mamá, quiero ser sindicalista liberado!

Si fuera sociólogo tal vez me pondría manos a la obra para realizar un estudio sobre la evolución, en los últimos 40 años, de lo que los niños quieren ser de mayores. En otros tiempos, las aspiraciones infantiles se decantaban por ser de mayores futbolistas, toreros, bomberos, aviadores y los muy avanzados tecnológicamente tenían la sana pretensión de ser astronautas. Aunque mi hijo Javier no lo sepa, creo que fue el que marcó la actual tendencia de niños y jóvenes de aspirar a un trabajo que no requiera méritos y en el que no sea preciso dar palos al agua.

Cuando Javier era niño, con 4 o 5 años, me lo solía llevar a la oficina de la empresa en la que trabajaba con la cosa de los ordenadores si tenía que ir algún sábado, domingo o festivo. Allí comenzó a palpar la dura realidad laboral y no tardó y cambiar sus aspiraciones de futuro, dijo que ya no quería ser espadachín y que de mayor quería ser “como el hombre ese que hay en la puerta de la fábrica y que le da a un botón y sube y baja la barrera”. Y todo porque el portero, muy amablemente, lo sentó en su silla un día y le dejó subir y bajar la barrera de entrada, eso hizo que se le encendiese una luz, porque vio en un rincón un televisor y luego el botoncito y concluyó que ese era un buen curro.

Todo esto viene a cuento porque el departamento unipersonal de demoscopia de Coña Press ha realizado una encuesta telepática sobre el tema y los resultados son alarmantes y altamente significativos. Se realizaron 389 entrevistas telepáticas a niños entre 7 y 12 años y la tabulación de las respuestas recopiladas a la pregunta ¿Qué querrías ser de mayor? es la siguiente:

Sindicalista liberado: 39%
Concursante de Gran Hermano: 21%
Político corrupto: 19%
Como Belén Esteban: 9%
Futbolista: 4%
Policía municipal: 2,8%
Trabajador en paro con subsidio: 2%
Probador de videojuegos: 1,34%
Miembro solidario de una ONG: 0,46%
Empresario: 0,23%
Astronauta: 0,19%
Trabajador sostenible y sostenido: 0,17%
Otros: 0,81%

Para que luego digan que nuestros niños y jóvenes no están al día y saben qué es lo que más les conviene. Ser liberado sindical ya es la aspiración de futuro mayoritaria, por algo será. Incluso yo quiero ser de mayor pupilo de Toxo y de Cándido.