Bibiana se desmadra, habla mal de los musulmanes y pifia la alianza de civilizaciones.

La excelentísima señora ministra de Igualdad del gobierno del Reino de España Doña Bibiana Aído se la ha jugado y bien jugado, se le va a caer el pelo, se ha desmadrado en los garridos combates que tiene con la derecha ultra extrema del PP sobre el aborto, se ha pasado dos pueblos, tres villas y doce ciudades hablando mal de los países musulmanes y eso le pasará factura, porque no es que simplemente haya hablado mal de esos países, es que se le fue la boca más de lo aconsejable queriendo echar sobre el PP todo lo que lleva dentro y ni corta ni perezosa la pifió al poner casi en pie de igualdad a los países musulmanes con nuestra derecha extrema del PP. Ese agravio a los países musulmanes es un ultraje que de alguna forma habrá que solucionar, y hasta se convierte en factible que ZP entregue a los musulmanes, como expiación del pecado de Bibiana, la cartera de ministra de Aído.

Con la de años que le ha llevado a nuestro gran presidente de Gobierno establecer unas cordiales relaciones con los países musulmanes, con los ímprobos esfuerzos que nuestras fuerzas de progreso han dedicado a establecer la superioridad de la cultura y religión musulmana sobre la decadente y derechista cultura católica, llega Bibiana y dice

“Las mujeres compartimos esta decisión con las personas que nos quieren y a las que queremos, pero si no hay confianza, ni la ley ni un juez podrán imponer su decisión a la de la mujer, porque precisamente la que está embarazada es ella, salvo que quiera usted acercar nuestra legislación a la de algunos países musulmanes en los que se exige la autorización expresa del marido”.

El usted del que habla Bibiana no es otro que Carlos Salvador, un diputado del  partido de extrema derecha PP. Lo que Aído ha dicho es que la política que propugna un partido tan extremo como el PP es comparable con la de los países musulmanes, ¡anatema!.

El delito de lesa musulmanidad perpetrado por Bibiana es inconcebible en una mujer de progreso, impensable en una miembra del gobierno de ZP, inadmisible en una socialista que comulga, en teoría, con las grandes propuestas de su jefe de gobierno para las alianzas de las civilizaciones, intolerable en una persona de izquierda, escandaloso en una persona como ella con valores de progreso, incalificable rozando lo inmoral y casi impúdico con visos de vejatorio, es despreciativo con los musulmanes, es afrentoso con ellos y deshonroso para un partido como el PSOE que no se merece que una de sus ministras les haga este roto en sus relaciones multicivilizaciones.

Por todo ello, creo que solo hay una solución que impida que Bibiana sea defenestrada por su pecado delictuoso anti musulmán, y es que abra un telediario en la Al Jazeera TV vestida con un burka desmintiéndose a sí misma y diciendo que no dijo lo que dijo, y que si se le había entendido así que pedía humildes disculpas a los países musulmanes que son el futuro de la humanidad.

Y no sé porque tarda tanto en buscarse un burka de diseño.