Ganar menos, es de cajón pero no evidente.

11-11-08

He leído parte de las observaciones de un empresario hechas en el congreso del Instituto de la Empresa Familiar. Ha dicho cosas en relación con la economía que son de cajón pero que al parecer no son evidentes para la mayoría, una de las más llamativas es la que dice en relación con las empresas que “No es preciso que cada año se gane más dinero que el anterior”. Gran verdad que muy pocas empresas tienen asumida, hay que ganar siempre más y más y hay que tener una cifra de ventas cada vez mayor, y si para ellos hay que tener precios más altos se tienen y si para ello hay que hacer cosas que no son más que aventuras, se hacen. Es la dependencia de la dichosa gráfica de beneficios en la que la rayita siempre debe ir hacia arriba para ser alguien.

Juan Roig, el empresario que dijo alguna de las verdades del barquero también comentó que “Los empresarios debemos apretarnos el cinturón y reducir todos los costes posibles en la formación de los precios de los productos y servicios, bajando lo más posible dichos precios”, cosa que me trae a la cabeza alguna declaración de constructores que decían eso de que preferían que el banco se llevase los pisos antes que bajar los precios.

Dijo también algo que puede que le traiga consecuencias respecto al gran economista Zapatero. Le reprocha el haber tardado tanto en reconocer la crisis. “Hemos perdido un tiempo precioso”, lamentó Roig, añadiendo que, mientras el tiempo pasaba, la situación se iba agravando. “Cuando se reconoce un problema, se tiene ya más del 50% de la solución, y en temas económicos también es aplicable”.

En relación con lo de ganar cada año más me viene a la cabeza un hecho que conocí personalmente hace unos años cuando trabajaba en una empresa fabricante de productos de alimentación. Se recibió una carta de un cliente poseedor de una cadena de supermercados que más o menos decía:

“Estimados señores: Les comunicamos que una vez hecho nuestro cierre contable anual, los resultados arrojan unos datos preocupantes. Los beneficios han estado por debajo de lo que teníamos presupuestado. De los 6.454 millones de pesetas de beneficio presupuestado hemos obtenido 1.100 menos (datos aproximados) por ellos nos vemos obligados a prorratear entre nuestros proveedores ese diferencial proporcionalmente a la cifra de compras que les hacemos. A ustedes les corresponde abonarnos 87 millones de pesetas. Esperamos contacten con nuestro departamento financiero para concretar el pago de esa cantidad.”

De momento no diré de qué empresa se trata, pero algún día llegará el día en que lo diga, sea de noche o de día. Evidentemente en la carta dejaban caer qué ocurriría si le empresa en que yo trabajaba no pasaba por el aro. Simplemente dejarían de comprar.

Ya solo felicitar al Sr. Roig por osar enfrentar a Zapatero con sus retrasos mendaces.

Documentación.

El Confidencial. Las grandes empresas entonan el 'mea culpa': "Tenemos que ganar menos y bajar precios"