Caso Casas, El País tiró la piedra y enseña la mano.

Qué gran jugada señores, El País, como siempre al servicio del poder socialista que encumbró en los aciagos días del 11 al 14 de marzo de 2004 con variadas técnicas y empleo exhaustivo de gallumbos de muslimes suicidas y acosos bien orquestados a sedes del PP en jornada de reflexión , ha vuelto a realizar un encaje de bolillos de alta política utilizando la cabeza de la señora María Emilia Casas a la que simuló defender y ahora le da estopa y escarnio para justificar el cambio urgente del Tribunal Constitucional y así garantizar a su prohijado Zapatero la aprobación de su medida más disruptiva hasta el momento, el estatuto de Cataluña.

Son muy cucos, pero como esta vez tiran la piedra y enseñan la mano se les ven las aviesas intenciones. Dice El País en su homilía dominical que el no asesoramiento que la presidenta del Constitucional le dio a una presunta asesina tiene importantes consecuencias políticas, dice que cometió un error, dice que fue imprudente, dice que es motivo de desprestigio para el tribunal que preside, dice que su acción es inaudita según cualquier estándar judicial, ha sido un lamentable episodio y dice que “cualquier sentencia que emane de su actual composición no se librará de la sombra del desprestigio”. Dicho todo lo que dicen de la señora Casas ¿creen ustedes que piden su inmediata dimisión del cargo que ocupa y que tanto desprestigia?, pues no señor, piden otra cosa que les interesa más a ellos y a su segundo en el escalafón progre Zapatero.

Lo que los mozos de PRISA, redactores de homilías e ideólogos del zapaterismo gobernante y del gobierno de Zapatero, exigen es otra cosa que queda clara ya en su segundo titular. “El desprestigio del alto tribunal exige su renovación antes de la sentencia del Estatuto“

“De esta última polémica a cuenta de la imprudencia de la presidenta (también inaudita, según cualquier estándar occidental) sólo es posible extraer una conclusión: la renovación del tribunal, pendiente ya desde hace meses, no puede esperar ni un minuto más”

Recordemos que El País tiró la piedra hace unos días cuando publicó completa la conversación telefónica de la presidenta Casas con la presunta asesina y en dicho artículo incluía la llamada pistola humeante del caso Casas, que es la frase de cuando le dice la presidenta a la viuda y presunta asesina que si recurría en amparo al tribunal que preside que la llamase, y claro eso echaba muchísimo humo. Mucha gente nos preguntábamos el motivo por el que El País le hacía un favor a la señora presidenta clavándole un rejón de muerte en su prestigio y hoy nos enseña El País la mano con la que tiró aquella piedra, lo hizo para pedir hoy la renovación del Tribunal Constitucional. Por cierto algo que el señor Requero, del CGPJ ya dijo en un medio no hace mucho y lo clavó.

Son geniales, aunque cada vez menos porque se le ve más el plumero,  en el uso del salvavidas agujereado, simulan que echan una mano por ejemplo en este caso a la presidenta del constitucional, le tiran un salvavidas pero con bujeros, como dicen en mi pueblo para que se hunda irremediablemente. Son así de pérfidos estos chicos progres ejemplo de malhomía.

María Emilia Casas ya sabe que con amigos como estos del PSOE, de PRISA y del gobierno no necesita enemigos. Ya lo decía mi abuelo “si no quieres recibir una coz no andes pegado tras los burros”

Documentación.

Editorial de El País. Urgencia constitucional. El desprestigio del alto tribunal exige su renovación antes de la sentencia del Estatuto