La caída del Angel Negro
La caída del Angel Negro
- ¿Si?
- Hola Rafa
Rafael escuchó esas dos palabras sabiendo que Lucia, su ex mujer, le preparaba para endosarle el enésimo problema del mes.
Aunque ya llevaban divorciados 4 años, Lucía no había dejado de cargarlo con dificultades, tareas, consultas, divagaciones y peticiones de la mas diversa índole; desde hacer las declaraciones de la renta tanto la suya como las de sus amigas, a montar y configurar el último ordenador que había comprado. Para ello se aprovechaba del misterioso poder que había adquirido sobre él desde los lejanos tiempos de sus primeros escarceos para hacer que jamás supiese como decirle no.
- Dime Lucía musitó Rafael mientras rezaba una especie de plegaria interior con la vana ilusión de que esta vez fuese solo a preguntarle cómo estaba de su úlcera.
- Verás Rafa, tengo un problema de aquí te espero, que incluso me está quitando el sueño y sé que solo tu vas a ser capaz de resolver, atiende, - Lucía parecía como si hubiese apretado el disparador de una ametralladora y las palabras surgían del móvil de Rafael como largas ráfagas que impactaban en su tímpano a tan alta velocidad que se sentía casi incapaz de asimilar lo que escuchaba en el chat en el que sabes que ando metida hay un jaleo monumental porque un tío, aunque bueno, otros dicen que puede ser una tía, anda metiéndose con todos y todas contando historias de lo mas hiriente, insultando sin parar y provocando en mas de una, en mi también, una sensación tal de impotencia que ya ninguna sabemos que hacer.
- ¿Y que quieres que haga, Lucía? dijo deseando que solo le pidiese algún consejo sobre como encarar el asunto.
- Rafa, se que solo tu eres capaz de aclarar este embrollo, porque verás, el tío que lleva como nick Angel_Negro esta haciendo eso hace ya una semana o más y nadie sabe quien puede ser, de lo que se trataría es de que tu te pusieses manos a la obra, con lo bien que tu sabes hacer eso, y que descubrieses quien es para que mas de una le pongamos las peras a cuarto replicó dando a Rafael la impresión de que estaba hablando con la presidenta de un comité de linchamiento.
- ¡Pero Lucía!, tu sabes que yo no chateo, ni se nada de eso, ¿Cómo quieres que yo puede llegar a saber quien puede ser el tal Angel_Negro? dijo sabiendo que solo era una especie de convención entre ambos para no decirle que si a la primera.
- Mira Rafa, el como lo vayas a hacer no lo sé, pero recuerdo cuando descubriste que el hijo de la María del 4ºC era el que rayaba los coches nuevos en el parking de nuestro edificio, echando alrededor del coche nuevo de Amparo aquellos polvos que le pediste a tu amigo de la Universidad y que solo tu podías ver con esa linterna tan chula que te dejaron, y que te bastó mirar el suelo de la puerta de todos los pisos para dar con el rastro de los polvos esta retahíla la tradujo Rafael por un seco y tajante ¡No me repliques!
- De acuerdo, Lucía, me pondré como tu dices manos a la obra, pero no estoy yo muy seguro de que vaya a sacar nada en claro. Rafael , una vez tomado el control del asunto, se sentía temporalmente liberado del extraño lazo de sumisión que en ciertas cuestiones aun le mantenía atado a su ex mujer Cuéntame ahora lo que sepas.
Lucía estaba a sus anchas, siendo incapaz de dejar de traslucir en sus palabras que había conseguido una nueva victoria.
Le contó, no solo las actividades de Angel_Negro sino también el historial chatero de la mayoría de las personas que deambulaban por tal lugar y las relaciones resultantes de tales actividades tipo quien estuvo con quien, quien está con quien, quien va detrás de quien, quien rompió con quien y quien dice qué de quien, salpimentándolo con todo tipo de pelos y señales. Rafael iba tomando nota de lo que oía mientras intentaba que el móvil que sujetaba con el hombro contra su oreja no rodase por el suelo.
Rafael, permanece callado un largo minuto cavilando, mientras Lucía sin perder sus inveteradas costumbres no dejaba de preguntarle en qué estaba pensando.
- ¡Calla un momento, Lucia! y atiende, habla con tus amigas del chat, pero hazlo por teléfono y les dices que a partir de ahora tomen nota de la fecha y hora a la que entra y sale Angel_Negro y que hagan un pequeño resumen del tipo de cosas que dice y lo mas importante, a quien se las dice, no hace falta que apunten todo con detalle y también coméntales que hagan memoria sobre lo ocurrido anteriormente para darte una lista de las personas a las que el tal Angel_Negro había ofendido o insultado.
Una semana después, Lucía le dio un montón de papeles con toda clase de notas que él fue pasando a limpio y esquematizando. Miró y remiró aquello pero no conseguía sacar nada en claro.
Lucía le llamaba todos los días dos o tres veces acosándolo a preguntas que el no podía responder salvo con un
- ¡Aun es pronto Lucía!, son pocos datos, necesito al menos que hagáis lo mismo un par de semanas más.
Rafael, cada noche, al volver del laboratorio en el que trabajaba, se sentaba en la mesa de su despacho, ante el montón de folios que iba engrosándose cada día mas, repasando una y otra vez aquellas palabras, analizando las fechas, pensando y dándole vueltas sin llegar a ningún sitio de interés.
Un día, en el laboratorio miró un calendario que un compañero tenía colgado en la pared y tuvo una idea que puso en práctica nada mas beber el primer güisqui tras regresar a su pequeño apartamento. Dibujó en un folio 7 columnas, una para cada día de la semana, y rayó lo suficiente para crear 24 filas afanándose a continuación en ir marcando con rotuladores de diferentes colores las casillas correspondientes al día de la semana y hora en que había entrado al chat el provocador al que perseguía.
Tras finalizar la labor, miró un instante el diagrama que había generado y de inmediato fue consciente de que allí había una pauta muy interesante. El mal bicho aquel entraba al chat de lunes a viernes algunas veces a medio día entre las doce y pico y las dos y algo, nunca antes y por la tarde noche a partir de las 6 . En los sábados y domingos no veía ninguna regla, era todo muy aleatorio, solo observó que por la noche, salvo en un caso, nunca entró a partir de las 11.
Con aquellos datos completamente asimilados, destellaba en su mente como un faro a toda potencia una particularidad sumamente llamativa, un miércoles, el mal sujeto, había entrado varias veces fuera del horario que parecía ser el suyo normal durante la semana. Aquellas horas eran similares a las de los fines de semana y eso le martirizaba pues sabía que allí podía estar la clave del misterio.
En principio, tenia muy claro que la persona que buscaba realizaba un trabajo con un horario tal que debía ajustarse al esquema que había producido. Solo ese maldito miércoles le estropeaba la solución.
Se puso a rebuscar en sus notas intentando averiguar a que día pertenecía la anomalía observada y una fecha se le grabó a fuego, el 27 de noviembre. A él, la fecha no le decía nada, pero estaba seguro que para Angel_Negro si tenía que ser significativa, salvo que ese día hubiese estado enfermo y no hubiese ido a trabajar. Desechó esa posibilidad de momento, manteniendo en alto la relevancia de tan importante, según el, irregularidad.
Para saber qué tenía de especial esa fecha, empezó buscándola en su agenda, nada más leer el santoral, se puso de pié eufórico diciendo en voz alta:
- ¡Ya te tengo, Angel Negro!
En su agenda decía que ese día se celebraba la festividad de San José de Calasanz, patrón de los maestros. Y esa era la profesión del Angel Negro, maestro de educación infantil o primaria, o maestra pensó también.
Inmediatamente cogió el móvil y llamó como enfebrecido.
- ¡Lucia, ya lo tengo! Es maestro o maestra, a ver, dime quien de los del chat tiene esa profesión que lo analicemos.
- Rafa, escucha, solo conozco a dos maestras, una es Coral y la otra Priscila41. Profesores y profesoras de instituto si se que hay mas, ¿te interesan también?
- No, solo de Educación Primaria e Infantil, porque los otros tienen de patrón a Santo Tomás de Aquino. respondió su ex marido con la seguridad de quien tiene agarrado el toro por los cuernos y sabe que ya no se puede mover.
- ¡Coño Rafa!, que ahora caigo que ninguna de las dos puede ser el Angel Negro, porque hace una semana estuvieron en mi casa las dos junto con otras 3 amigas mas del chat y entramos para divertirnos un rato cambiándonos los nicks, y justo en ese momento estaba el mamón ese haciendo de las suyas.
- Vale Lucia.- fue lo único que pudo decirle Rafael que cortó la llamada mientras oía en su interior los atronadores crujidos originados por sus esquemas, tan bien construidos, mientras se venían abajo.
Permaneció inmóvil en su silla durante mas de media hora, con la mente en blanco, como si estuviese conmocionado. Al cabo empezó a decir, mientras hacia un paquete con los folios que tenia desperdigados sobre la mesa:
- ¡No puede ser!, lo tenia atrapado, ya está el puñetero del Murphy haciéndome de nuevo de las suyas.
Se dirigió al frigorífico e hizo lo que hacía normalmente cuando se le rompían los esquemas, coger la cubitera mas grande para no dejar solo al contenido de la botella de Jack Daniels que acababa de abrir.
Tuvo suerte que la mañana siguiente era una mañana de sábado y eso le dio tiempo para tapar someramente el estropicio interior que se le había originado. Las tres llamadas de Lucía solo sirvieron para generar un par más de toneladas de escombros interiores. No obstante con una cierta periodicidad despotricaba en alto sobre el asunto:
- ¿Qué leche me importa a mi el so mamón ese y toda su patulea?, por mi que siga entreteniendo al personal hasta que el infierno tenga que reponer combustible.
- ¡Que gano yo aclarando una simple venganza infantil¡
Terminada de elevar esa frase a las alturas, la palabra infantil empezó a repiquetear en sus neuronas con la estridencia de mil campanas lanzadas al voleo.
- Infantil, infantil, infantil, infantil, infantil,.........- no dejaba de repetírselo como una loca letanía sin sentido.
Al poco, se quedo quieto, mudo, como paralizado, pensando
- ¡Claro coño! Eso es, como no se me había ocurrido antes, pero que tarugo que soy, si es que no soy mas burro porque no como mas paja con el pan integral. El horario escolar no solo lo tienen los maestros, también ¡lo tienen los niños!, el Angel Negro es un niño, ¡Válgame Dios¡, un niño, quien lo iba a decir.
Su mente se puso a trabajar febril y convulsamente, en solo una fracción de segundo ya sabía como averiguar quien era el chaval que había montado el tiberio. Agarró el montón de folios del asunto como el naufrago que se aferra a un madero a la deriva, buscó la lista de personas injuriadas por el provocador y memorizó las únicas 3 significativas con las que no se había metido.
Allí estaban, 3 mujeres al parecer según sus nicks, Deneb, Alcor y Bellatix.
- Vaya! pensó Rafael tres nombres de estrellas, ¡pero que curioso.!
- Lucía, esta vez si que lo tengo, - le dijo a su ex a la que llamó de inmediato dime si conoces a estos tres nicks, Deneb, Alcor y Bellatrix y sobre todo quiero saber quien tiene hijos entre 7 y 12 años.
- Espero Rafa que esta vez hayas atinado, pero ¿qué tienen que ver los hijos en esto?
- Tu Lucía contéstame que ya te contaré le dijo Rafael bajo un ataque acuciante de premura.
- Pues mira chico, la única que tiene hijos en esas edades es mi amiga Bellatrix, que tiene a su Norberto con 12 años, las demás tienen hijos pero son mas pequeños.
- Pues bien, dile a tu amiga Bellatrix, que el tal Angel Negro es su hijo Norberto, que le hable y sobre todo le diga de donde ha sacado la información de la que hacia gala y el lenguaje que usaba, es lo único que aun no me cuadra pero creo que podría explicarlo fácilmente.
A la tarde siguiente, Rafael fue invitado por su ex mujer a tomar un café. Allí le explicó todo lo que Bellatrix le había contado.
- La verdad es que eres un genio, Rafa, no se como lo has hecho, pero sí, era Norberto, se lo confesó ayer mismo a su madre y le contó todo. Lucía se relamió los labios solo de saber que en ese momento era la única, salvo su amiga, que tenia la información. Te cuento, ayer, cuando fui a su casa para hablar con ella, se lo dije, y un poco mas y me echa a patadas, pero yo le insistí que si mi Rafael lo decía algo debía de haber, que habías descubierto que era un niño de entre 8 y 12 años, mas probablemente entre 11 y 12 y que seguramente se habría enterado de algún disgusto que le hubiesen ocasionado a su madre en el chat o gente del chat y que él como venganza había montado el numerito del Angel Negro.
Ella se quedó como congelada, y me dijo que su hijo estaba enterado de que el Pistolero, cuando la dejó, fue contando historias de ella y también de que antes de dejarla se había liado con 3 o 4 tías del chat. Me comentó que varias veces su hijo Norberto le había preguntado sobre el asunto. Resumiendo, que me fui y cuando llegó Norberto habló con el y lo puso entre la espalda y la pared, o como se diga eso, - Lucía siempre se equivocaba con los dichos y tenía un arte especial para traviscornearlos-, en fin que el chaval viéndose acorralado se lo confesó todo, que sí, que lo había hecho para joder a los del chat que tanto daño habían hecho a su madre y que la información sobre la gente del chat la tenía porque se bajó un programa que tiene puesto en el ordenador con el que guardaba todas las conversaciones de su madre tanto los privados como lo que se decía en el general, y lo del lenguaje dice que fue fácil, solo tuvo que entrar en algunos canales del IRC tipo Insultos salvajes o Escupe por tu boca para aprender.
Rafael volvió a casa recordando lo que tantas veces Lucía le había reprochado, y que al final usó como motivo de su separación, que su vida era una rutina y que jamás sabría cuando irse al otro barrio porque es algo que se hace solo una vez y que aun no tenia programado en su actividad diaria. Esa noche, a solas con su cubitera pequeña, solo tomó tres güisquis en lugar de los seis de rigor. Por una vez no quería olvidar del todo.
ADVERTENCIA: todos los personajes son ficticios, todo parecido con la realidad es pura intercontextualidad.
AGRADECIMIENTOS: a Mar Lledó por su amabilidad al leer y criticar el borrador inconcluso de este relato.
(Orel, 13 de julio de 2003)
- ¿Si?
- Hola Rafa
Rafael escuchó esas dos palabras sabiendo que Lucia, su ex mujer, le preparaba para endosarle el enésimo problema del mes.
Aunque ya llevaban divorciados 4 años, Lucía no había dejado de cargarlo con dificultades, tareas, consultas, divagaciones y peticiones de la mas diversa índole; desde hacer las declaraciones de la renta tanto la suya como las de sus amigas, a montar y configurar el último ordenador que había comprado. Para ello se aprovechaba del misterioso poder que había adquirido sobre él desde los lejanos tiempos de sus primeros escarceos para hacer que jamás supiese como decirle no.
- Dime Lucía musitó Rafael mientras rezaba una especie de plegaria interior con la vana ilusión de que esta vez fuese solo a preguntarle cómo estaba de su úlcera.
- Verás Rafa, tengo un problema de aquí te espero, que incluso me está quitando el sueño y sé que solo tu vas a ser capaz de resolver, atiende, - Lucía parecía como si hubiese apretado el disparador de una ametralladora y las palabras surgían del móvil de Rafael como largas ráfagas que impactaban en su tímpano a tan alta velocidad que se sentía casi incapaz de asimilar lo que escuchaba en el chat en el que sabes que ando metida hay un jaleo monumental porque un tío, aunque bueno, otros dicen que puede ser una tía, anda metiéndose con todos y todas contando historias de lo mas hiriente, insultando sin parar y provocando en mas de una, en mi también, una sensación tal de impotencia que ya ninguna sabemos que hacer.
- ¿Y que quieres que haga, Lucía? dijo deseando que solo le pidiese algún consejo sobre como encarar el asunto.
- Rafa, se que solo tu eres capaz de aclarar este embrollo, porque verás, el tío que lleva como nick Angel_Negro esta haciendo eso hace ya una semana o más y nadie sabe quien puede ser, de lo que se trataría es de que tu te pusieses manos a la obra, con lo bien que tu sabes hacer eso, y que descubrieses quien es para que mas de una le pongamos las peras a cuarto replicó dando a Rafael la impresión de que estaba hablando con la presidenta de un comité de linchamiento.
- ¡Pero Lucía!, tu sabes que yo no chateo, ni se nada de eso, ¿Cómo quieres que yo puede llegar a saber quien puede ser el tal Angel_Negro? dijo sabiendo que solo era una especie de convención entre ambos para no decirle que si a la primera.
- Mira Rafa, el como lo vayas a hacer no lo sé, pero recuerdo cuando descubriste que el hijo de la María del 4ºC era el que rayaba los coches nuevos en el parking de nuestro edificio, echando alrededor del coche nuevo de Amparo aquellos polvos que le pediste a tu amigo de la Universidad y que solo tu podías ver con esa linterna tan chula que te dejaron, y que te bastó mirar el suelo de la puerta de todos los pisos para dar con el rastro de los polvos esta retahíla la tradujo Rafael por un seco y tajante ¡No me repliques!
- De acuerdo, Lucía, me pondré como tu dices manos a la obra, pero no estoy yo muy seguro de que vaya a sacar nada en claro. Rafael , una vez tomado el control del asunto, se sentía temporalmente liberado del extraño lazo de sumisión que en ciertas cuestiones aun le mantenía atado a su ex mujer Cuéntame ahora lo que sepas.
Lucía estaba a sus anchas, siendo incapaz de dejar de traslucir en sus palabras que había conseguido una nueva victoria.
Le contó, no solo las actividades de Angel_Negro sino también el historial chatero de la mayoría de las personas que deambulaban por tal lugar y las relaciones resultantes de tales actividades tipo quien estuvo con quien, quien está con quien, quien va detrás de quien, quien rompió con quien y quien dice qué de quien, salpimentándolo con todo tipo de pelos y señales. Rafael iba tomando nota de lo que oía mientras intentaba que el móvil que sujetaba con el hombro contra su oreja no rodase por el suelo.
Rafael, permanece callado un largo minuto cavilando, mientras Lucía sin perder sus inveteradas costumbres no dejaba de preguntarle en qué estaba pensando.
- ¡Calla un momento, Lucia! y atiende, habla con tus amigas del chat, pero hazlo por teléfono y les dices que a partir de ahora tomen nota de la fecha y hora a la que entra y sale Angel_Negro y que hagan un pequeño resumen del tipo de cosas que dice y lo mas importante, a quien se las dice, no hace falta que apunten todo con detalle y también coméntales que hagan memoria sobre lo ocurrido anteriormente para darte una lista de las personas a las que el tal Angel_Negro había ofendido o insultado.
Una semana después, Lucía le dio un montón de papeles con toda clase de notas que él fue pasando a limpio y esquematizando. Miró y remiró aquello pero no conseguía sacar nada en claro.
Lucía le llamaba todos los días dos o tres veces acosándolo a preguntas que el no podía responder salvo con un
- ¡Aun es pronto Lucía!, son pocos datos, necesito al menos que hagáis lo mismo un par de semanas más.
Rafael, cada noche, al volver del laboratorio en el que trabajaba, se sentaba en la mesa de su despacho, ante el montón de folios que iba engrosándose cada día mas, repasando una y otra vez aquellas palabras, analizando las fechas, pensando y dándole vueltas sin llegar a ningún sitio de interés.
Un día, en el laboratorio miró un calendario que un compañero tenía colgado en la pared y tuvo una idea que puso en práctica nada mas beber el primer güisqui tras regresar a su pequeño apartamento. Dibujó en un folio 7 columnas, una para cada día de la semana, y rayó lo suficiente para crear 24 filas afanándose a continuación en ir marcando con rotuladores de diferentes colores las casillas correspondientes al día de la semana y hora en que había entrado al chat el provocador al que perseguía.
Tras finalizar la labor, miró un instante el diagrama que había generado y de inmediato fue consciente de que allí había una pauta muy interesante. El mal bicho aquel entraba al chat de lunes a viernes algunas veces a medio día entre las doce y pico y las dos y algo, nunca antes y por la tarde noche a partir de las 6 . En los sábados y domingos no veía ninguna regla, era todo muy aleatorio, solo observó que por la noche, salvo en un caso, nunca entró a partir de las 11.
Con aquellos datos completamente asimilados, destellaba en su mente como un faro a toda potencia una particularidad sumamente llamativa, un miércoles, el mal sujeto, había entrado varias veces fuera del horario que parecía ser el suyo normal durante la semana. Aquellas horas eran similares a las de los fines de semana y eso le martirizaba pues sabía que allí podía estar la clave del misterio.
En principio, tenia muy claro que la persona que buscaba realizaba un trabajo con un horario tal que debía ajustarse al esquema que había producido. Solo ese maldito miércoles le estropeaba la solución.
Se puso a rebuscar en sus notas intentando averiguar a que día pertenecía la anomalía observada y una fecha se le grabó a fuego, el 27 de noviembre. A él, la fecha no le decía nada, pero estaba seguro que para Angel_Negro si tenía que ser significativa, salvo que ese día hubiese estado enfermo y no hubiese ido a trabajar. Desechó esa posibilidad de momento, manteniendo en alto la relevancia de tan importante, según el, irregularidad.
Para saber qué tenía de especial esa fecha, empezó buscándola en su agenda, nada más leer el santoral, se puso de pié eufórico diciendo en voz alta:
- ¡Ya te tengo, Angel Negro!
En su agenda decía que ese día se celebraba la festividad de San José de Calasanz, patrón de los maestros. Y esa era la profesión del Angel Negro, maestro de educación infantil o primaria, o maestra pensó también.
Inmediatamente cogió el móvil y llamó como enfebrecido.
- ¡Lucia, ya lo tengo! Es maestro o maestra, a ver, dime quien de los del chat tiene esa profesión que lo analicemos.
- Rafa, escucha, solo conozco a dos maestras, una es Coral y la otra Priscila41. Profesores y profesoras de instituto si se que hay mas, ¿te interesan también?
- No, solo de Educación Primaria e Infantil, porque los otros tienen de patrón a Santo Tomás de Aquino. respondió su ex marido con la seguridad de quien tiene agarrado el toro por los cuernos y sabe que ya no se puede mover.
- ¡Coño Rafa!, que ahora caigo que ninguna de las dos puede ser el Angel Negro, porque hace una semana estuvieron en mi casa las dos junto con otras 3 amigas mas del chat y entramos para divertirnos un rato cambiándonos los nicks, y justo en ese momento estaba el mamón ese haciendo de las suyas.
- Vale Lucia.- fue lo único que pudo decirle Rafael que cortó la llamada mientras oía en su interior los atronadores crujidos originados por sus esquemas, tan bien construidos, mientras se venían abajo.
Permaneció inmóvil en su silla durante mas de media hora, con la mente en blanco, como si estuviese conmocionado. Al cabo empezó a decir, mientras hacia un paquete con los folios que tenia desperdigados sobre la mesa:
- ¡No puede ser!, lo tenia atrapado, ya está el puñetero del Murphy haciéndome de nuevo de las suyas.
Se dirigió al frigorífico e hizo lo que hacía normalmente cuando se le rompían los esquemas, coger la cubitera mas grande para no dejar solo al contenido de la botella de Jack Daniels que acababa de abrir.
Tuvo suerte que la mañana siguiente era una mañana de sábado y eso le dio tiempo para tapar someramente el estropicio interior que se le había originado. Las tres llamadas de Lucía solo sirvieron para generar un par más de toneladas de escombros interiores. No obstante con una cierta periodicidad despotricaba en alto sobre el asunto:
- ¿Qué leche me importa a mi el so mamón ese y toda su patulea?, por mi que siga entreteniendo al personal hasta que el infierno tenga que reponer combustible.
- ¡Que gano yo aclarando una simple venganza infantil¡
Terminada de elevar esa frase a las alturas, la palabra infantil empezó a repiquetear en sus neuronas con la estridencia de mil campanas lanzadas al voleo.
- Infantil, infantil, infantil, infantil, infantil,.........- no dejaba de repetírselo como una loca letanía sin sentido.
Al poco, se quedo quieto, mudo, como paralizado, pensando
- ¡Claro coño! Eso es, como no se me había ocurrido antes, pero que tarugo que soy, si es que no soy mas burro porque no como mas paja con el pan integral. El horario escolar no solo lo tienen los maestros, también ¡lo tienen los niños!, el Angel Negro es un niño, ¡Válgame Dios¡, un niño, quien lo iba a decir.
Su mente se puso a trabajar febril y convulsamente, en solo una fracción de segundo ya sabía como averiguar quien era el chaval que había montado el tiberio. Agarró el montón de folios del asunto como el naufrago que se aferra a un madero a la deriva, buscó la lista de personas injuriadas por el provocador y memorizó las únicas 3 significativas con las que no se había metido.
Allí estaban, 3 mujeres al parecer según sus nicks, Deneb, Alcor y Bellatix.
- Vaya! pensó Rafael tres nombres de estrellas, ¡pero que curioso.!
- Lucía, esta vez si que lo tengo, - le dijo a su ex a la que llamó de inmediato dime si conoces a estos tres nicks, Deneb, Alcor y Bellatrix y sobre todo quiero saber quien tiene hijos entre 7 y 12 años.
- Espero Rafa que esta vez hayas atinado, pero ¿qué tienen que ver los hijos en esto?
- Tu Lucía contéstame que ya te contaré le dijo Rafael bajo un ataque acuciante de premura.
- Pues mira chico, la única que tiene hijos en esas edades es mi amiga Bellatrix, que tiene a su Norberto con 12 años, las demás tienen hijos pero son mas pequeños.
- Pues bien, dile a tu amiga Bellatrix, que el tal Angel Negro es su hijo Norberto, que le hable y sobre todo le diga de donde ha sacado la información de la que hacia gala y el lenguaje que usaba, es lo único que aun no me cuadra pero creo que podría explicarlo fácilmente.
A la tarde siguiente, Rafael fue invitado por su ex mujer a tomar un café. Allí le explicó todo lo que Bellatrix le había contado.
- La verdad es que eres un genio, Rafa, no se como lo has hecho, pero sí, era Norberto, se lo confesó ayer mismo a su madre y le contó todo. Lucía se relamió los labios solo de saber que en ese momento era la única, salvo su amiga, que tenia la información. Te cuento, ayer, cuando fui a su casa para hablar con ella, se lo dije, y un poco mas y me echa a patadas, pero yo le insistí que si mi Rafael lo decía algo debía de haber, que habías descubierto que era un niño de entre 8 y 12 años, mas probablemente entre 11 y 12 y que seguramente se habría enterado de algún disgusto que le hubiesen ocasionado a su madre en el chat o gente del chat y que él como venganza había montado el numerito del Angel Negro.
Ella se quedó como congelada, y me dijo que su hijo estaba enterado de que el Pistolero, cuando la dejó, fue contando historias de ella y también de que antes de dejarla se había liado con 3 o 4 tías del chat. Me comentó que varias veces su hijo Norberto le había preguntado sobre el asunto. Resumiendo, que me fui y cuando llegó Norberto habló con el y lo puso entre la espalda y la pared, o como se diga eso, - Lucía siempre se equivocaba con los dichos y tenía un arte especial para traviscornearlos-, en fin que el chaval viéndose acorralado se lo confesó todo, que sí, que lo había hecho para joder a los del chat que tanto daño habían hecho a su madre y que la información sobre la gente del chat la tenía porque se bajó un programa que tiene puesto en el ordenador con el que guardaba todas las conversaciones de su madre tanto los privados como lo que se decía en el general, y lo del lenguaje dice que fue fácil, solo tuvo que entrar en algunos canales del IRC tipo Insultos salvajes o Escupe por tu boca para aprender.
Rafael volvió a casa recordando lo que tantas veces Lucía le había reprochado, y que al final usó como motivo de su separación, que su vida era una rutina y que jamás sabría cuando irse al otro barrio porque es algo que se hace solo una vez y que aun no tenia programado en su actividad diaria. Esa noche, a solas con su cubitera pequeña, solo tomó tres güisquis en lugar de los seis de rigor. Por una vez no quería olvidar del todo.
ADVERTENCIA: todos los personajes son ficticios, todo parecido con la realidad es pura intercontextualidad.
AGRADECIMIENTOS: a Mar Lledó por su amabilidad al leer y criticar el borrador inconcluso de este relato.
(Orel, 13 de julio de 2003)
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