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Sahumerios y arrebatos

Aguirre y la cólera de El País.

O de cómo El País le pide a Rajoy que acabe con Esperanza ya que ellos son incapaces.

Esperanza Aguirre se le ha atragantado a El País desde que el oxidado y escacharrado panzer insignia de la división mediática Das Reich (el imperio) la tiene enfilada con todas sus armas y disparándole todo lo que tiene, incluida la actividad de las tropas auxiliares de la SER. Esa mujer es inmune al torrencial e inmisericorde bombardeo  al que la tiene sometida el impotente El País, y ella hasta se guasea de ellos, reprochándoles que marran todos sus disparos, se pitorrea de ellos contando las portadas inanes que le dedican y que no hacen mella en ella, y por eso Aguirre ha terminado desatando la cólera de los hijos del dios laico Polanco. Es tan grande el furor priserino contra Esperanza, es tan desquiciante su frenesí desesperado, que hoy publican el enésimo artículo de gran formato contra Aguirre y la cagan por el nerviosismo.

El diario global que dice ser el de más calidad que existe sobre el planeta en lengua castellana, publica hoy domingo un desastre tipográfico ordenando a Rajoy, por duplicado titular, que “acabe con ella”, con Esperanza,  así, textualmente, porque ellos son incapaces de conseguirlo y si Mariano no se carga a Aguirre su submarino en el PP, Gallardón, no podrá ser nunca aquello para lo que El País le postula, sustituto de Rajoy.

El desaguisado montado por la cólera de El País es desternillante, duplicar el titular en domingo es pecado que ninguna penitencia mediática podrá hacer olvidar.



Igual se dan cuenta un día de estos y retiran su reiterada e insistente orden a Rajoy para que descabece a Esperanza.

Es curioso ese larguísimo subtitular, si uno hace el ejercicio de cambiar Rajoy por El País y se adapta la idea, queda clarito a qué nivel ha llegado la ojeriza furibunda de Prisa hacia Esperanza.

Prisa no puede con ella.
Es nuestra peor pesadilla. Cada día, con su actitud, nos recuerda que nosotros estamos con el agua al cuello y ella gobierna. La resistencia de Esperanza Aguirre debilita al líder, El País, y desestabiliza a Prisa, sumida en el caos.  Prisa le pide a Rajoy que acabe con ella.  El País está harto, pero no logra dominarlaEs nuestra peor pesadilla. Cada día, con su actitud, nos recuerda que nosotros estamos con el agua al cuello y ella gobierna. La resistencia de Esperanza Aguirre debilita al líder, El País, y desestabiliza a Prisa, sumida en el caos. Prisa le pide a Rajoy que acabe con ella. El País está harto, pero no logra dominarla


Cada día, la calidad  del diario global es menor, pero de momento está proporcionando entretenimiento a espuertas a los paisólogos, y yo, como paisólogo aficionado reconozco que me lo paso de cine. No todos los días puede uno ver la caída de un imperio sentado cómodamente ante una ventana de Windows.

Documentación.

El País. Rajoy no puede con ella.

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