Marchesi, de artífice de la LOGSE a eximio émulo de Cantinflas.

La vida es una filfa cuando uno no tiene un objetivo vital, algo que le justifique el ser y el estar. Deambular por los oscuros callejones del devenir dando tumbos erráticos de la Ceca del sinsentido a la Meca de la otredad asincrónica impermeabilizada es la mejor forma de nihilidad, yuxtapuesta a la peor manera de amañar nuestra existencia. El no tener un algo en la vida que le haga a uno decir y sentir que tiene algo en la vida que hace que la vida tenga algo por lo que uno pueda sentirse alguien es algo que no sé cómo calificar, más que nada porque una parida como la que acabo de escribir es incalificable.

Yo me maravillo de mi capacidad mañanera de hacerme introspecciones que sacan a luz la carencia vital de una meta que alcanzar y sin embargo hoy por fin se ha hecho la luz para mí y sin necesitar la bombillita que aún no me ha mandado Sebastián. Hoy soy feliz gracias a Marchesi. Hoy, gracias a ese gran hombre he encontrado ese algo que necesitaba tan vitalmente para ser alguien. Hoy y mañana y el resto de mis días ya tengo una tarea que haga de mi lo que hasta ahora no he sido, un miembro de esta sociedad que va a trasformar esta sociedad para mejorarla, para hacerla más sociedad, para hacerla menos limitada y menos anónima.

Alvaro Marchesi, el munífice artífice de la LOGSE, el que sacó a España del oscurantismo educativo franquista y consiguió hacer universal la luz de la cultura de la supina ignorancia dice hoy en una cosa de El País algo que me ha puesto las escarpias como pelos de gallina y me ha hecho caer de la silla, y si hubiese tenido caballo hasta habría emulado al tal Paulo de Tarso.

“Tenemos que transformar la educación para transformar la sociedad. Y transformar la sociedad para transformar la educación”

Este brillante hombre ya me ha dado una razón para vivir mejor que la que atesoraba hasta hoy, consistente en vivir despreocupado sin tener una razón para vivir. Este brillantísimo pedagogo se ha puesto a emular a Cantinflas y lo ha mejorado, ese hito en su biografía ya nadie se lo va a arrebatar, aunque aprovecho para darle un consejo. Dado que es el mayor y mejor especialista transformador de la luz del saber y del conocimiento, puede que alguna compañía eléctrica de las que ahora andan apuradas con sus infraestructuras lo utilicen cuando se les escoñe alguno de sus transformadores de la luz.

Ya solo espero que el señor Marchesi diseñe un plan detallado de transformación de la sociedad para que yo pueda iniciar mi labor de transformar mi vida para que así pueda transformar la sociedad con lo que sé que transformando la sociedad podré transformar mi vida.