TV y el regodeo rentable en la violencia con rasgado de vestiduras.

La noticia es vieja como la humanidad, alguien apalea a alguien más débil. Es noticia triste pero que por sí misma no es noticia salvo que otro alguien haya grabado la paliza y las imágenes hayan llegado a alguna televisión. En ese momento todos los responsables de ese medio se visten con 45 o más vestimentas una encima de otra con la única finalidad de lanzar lastimeros reproches contra tanta violencia gratuita a la par que se escandalizan 45 veces y se rasgan las vestiduras otras tantas, pero no porque realmente les preocupe el reprobable hecho, sino para dar pie a emitir las imágenes 45 veces.

Que unas imágenes así son negocio no es algo que se descubriera ayer, cuando Tele 5 emitió en el telediario de medio día el apaleamiento de una joven por otra con el curioso detalle de que estos píos y antiviolentos de Tele 5 tapan la cara a la agresora pero no a la agredida, y ello a pesar de que al ser un video tomado con un móvil la calidad era nula.

Es de reconocer el arte y la habilidad que tienen para poder meter en la media hora de un telediario más de 5 veces las imágenes, para lo que nada como poner el farisaico grito en el cielo y a repetir porque el negocio es el negocio. Hay violentos y mamelucos que se regodean en la violencia y la exprimen hasta la última gota para sacar pasta de los espectadores que disfrutan viendo la misma cosa decenas de veces.

Yo no veo la televisión, solo algún medio día la miro unos minutos mientras como y reconozco que motivos para no seguir viéndola me dan cada vez que le echo un ojo. Imagino que en el resto de televisiones pasaría algo similar.

¿Alguien duda que aun sabiendo que poner esas imágenes crea un efecto llamada para que otros apaleadores hagan de las suyas solo con la esperanza de ver su video en los telediarios van a emitir imágenes así solo una vez en lugar de decenas de veces?, evidentemente nos dirán que como periodistas que son están obligados a dar la noticia aunque sea de ese tipo, y que regodearse en el fango de la violencia solo se hace para que los telespectadores estén bien informados.

Ojalá fuese solo telebasura, lo asqueroso es que sea tan farisea con un buenismo emético.