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Sahumerios y arrebatos

Envenenamiento medicamentoso algo que mata mucho pero no existe.

Vivimos en un extraño país y en un extraño planeta. Ocurren aquí cosas muy raras, una de las mas estrambóticas es  la reiteración de esta sociedad en escandalizarse, poner el grito en el cielo, hacer sonar la alarma social de forma estridente e incluso de montar la marimorena por cosas que en la práctica resultan al final inocuas y otras que causan cientos de muertes al año se considera como algo que no tiene importancia, ni se comenta. Nos han programado para considerar intrascendente lo que nos dicen que es nimio a pesar de ser de gran importancia y al revés a tratar como importante lo que es banal.

Si se pregunta a cien personas de este país sobre lo de las vacas locas, 98 recuerdan lo que pasó, si se le pregunta cuantos muertos o afectados hubo en España por aquello ya dicen que debió haber pero no recuerdan, la realidad es que no hubo ni un solo afectado, alguno hubo que vino de otro país. Sin embargo hay algo que produce cientos de muertes en España al año, un servicio por todos utilizado y ni se comenta. Hablo del envenenamiento medicamentoso por error de prescripción facultativa, no de la automedicación. En el concepto de error de prescripción se engloban dos cosas muy distintas, la una es el puro error que los médicos pueden cometer como lo podemos cometer cualquier ser humano en su actividad, esos no los considero. La otra, aunque la llamen error no lo es tal, tiene otro nombre y me refiero a la prescripción reiterada de un medicamento contraindicado o por mucho mas tiempo del establecido para que lo tome el paciente. Si un medicamento se prescribe durante más de 15 días y se corre el riesgo de muerte, de contraer una hepatitis y otro riesgo grave y decenas de médicos lo recetan durante 2 años eso no es un error eso tiene otro nombre que es más que imprudencia temeraria.

Hoy El País publica un artículo sobre el tema de los medicamentos, es largo y pensé que trataría de algún modo esta grave cuestión, pero no es así. Aparece por ahí enterrado en palabras, aunque dice esto tan tremendo

La Organización Mundial de la Salud, que considera una prioridad establecer políticas para el uso racional de los medicamentos, estima que cerca de la mitad de las medicinas se recetan, se dispensan o se utilizan de una forma inadecuada.”

Hace un año, el 15-2-06 escribí sobre esto. Como soy gandul en extremo,  copio y pego.

Este tema empezó a preocuparme cuando en mi familia, y hablo de mis padres y cinco hermanos, ocurrieron en un plazo de tiempo no muy largo 3 graves errores de prescripción. Ya sé que estadísticamente mi caso familiar no es significativo, por ello procuré buscar información y lo que encontré me heló la sangre. Hablo de errores como el siguiente: en una enfermedad crónica, alguien de la familia lee el folleto de un medicamento que un familiar estaba tomando hacía más de 10 años, en el ponía que solo se podía prescribir durante no más de 3 o 4 meses, pues si se tomaba más tiempo había elevado riesgo de crear dependencia y no se que cosas más. Entiendo un error de pasarse unos días, un par de meses, pero ¿9 años?. Piensen en la cantidad de médicos distintos que firmaron esas recetas y ni uno solo cortó con la prescripción ni detectó el “error”. Ese familiar lógicamente necesitó un tiempo para deshabituarse, por decirlo de algún modo.

A otro familiar directo, tras estar tomando un medicamento durante un año, o más, se enteró leyendo también el folleto que estaba contraindicado tomarlo durante más de 15 días, el riesgo era el de contraer una hepatitis de no se que tipo e incluso riesgo de muerte, y el contrajo la hepatitis, claro.

No hablo de automedicación, hablo de recetas prescritas por médicos titulados, que expiden recetas y más recetas, o como dicen en mi pueblo, recetan todos los cartones que les llevan y así no tienen problemas con los pacientes. Se suele justificar esta situación diciendo que no tienen tiempo para más.

En cualquier otra profesión o actividad, un caso así, aunque solo ocurriesen una centésima parte de las muertes que ocurren por el tipo de error que comento, estaría en primera página de los periódicos durante meses. Recuerden el caso de las vacas locas, los pollos contaminados, el aceite de orujo y otros similares que no ocasionaron ni una sola muerte pero si dieron para cientos de portadas en los periódicos.

Otro miembro de la familia sale del hospital operado del corazón, le prescriben 5 cosas a tomar ya de por vida, se encontró raro, y a la semana y pico de estar en casa le dio por leer los prospectos, en una medicina ponía algo así.... “ no se puede prescribir en caso de enfermos coronarios y menos recién operados, pues puede originar....” bueno la risa. Este caso que me ocurrió a mi si lo considero un error.

Las cifras de muertes originadas por errores de prescripción que leí en su momento eran espeluznantes. No digo nada de España no se me vaya a caer el pelo, pero por ejemplo, en Estados Unidos al año se producen más de una decena de miles de muertes. Incluso he leído que hasta un 10% de los ingresos en hospitales tienen como origen el envenenamiento medicamentoso.

Cuento todo esto por dos motivos, el uno que como he dicho otras veces no entiendo como no ha sonado la alarma social por este caso, como ven es grave y ocasiona muertes, pero se ve que la alarma social solo la activan las vacas no los visitantes de los ambulatorios.

El segundo motivo es el de la desidia generalizada ante el problema. Admitamos que con la actual estructura no se puede hacer mejor (cosa con la que no estoy de acuerdo), pero se da la casualidad que hoy he ido al médico a por unas recetas y he visto que la estructura estaba cambiando, pues la doctora tenía un precioso ordenador en el que metía los datos y hacía las recetas.

Me he puesto a hablar con ella sobre el tema, y resulta que al menos en Murcia, el ordenador solo hace recetas y lleva una especie de historia clínica, pero no dispone de ninguna herramienta informática para detectar errores de prescripción distintos de los que ya evita por el simple hecho de que no vayan las recetas con letra de médico.

Con lo fácil, aunque cueste pasta, que sería disponer de algún programa que cruzase la información de lo que me recetan con anteriores recetas del mismo medicamento y que diese una alarma para el médico avisando de una posible sobredosis por extralimitarse en la duración de la prescripción.

Un sistema informatizado para la emisión de recetas, o prescripciones médicas, también llamado CPOE por sus siglas en inglés (Computerized Physician Orden Entry) dicen los que de eso saben que podría reducir los errores en un 50%,  hablando el plata, podrían reducir el número de muertos por errores médicos de prescripción a la mitad.

Seguro que sería incluso rentable, no hablo ya de evitar muertes, pero al parecer o no se les ha ocurrido o piensan que eso es mucho avance. Lo que me malicio es que igual alguien ha pensado que con un chisme encima de la mesa de la consulta ya somos modernos.

Y mientras los ambulatorios siguen siendo centros de riesgo y ni pasa nada ni se dice nada. ¿En otras profesiones se llamaría a algo así homicidio involuntario o voluntario? Yo sé, porque lo he hablado con bastantes médicos que son conscientes de lo que hacen, pero ni se preocupan porque no tienen tiempo y no quieren enfrentarse a los pacientes, así que ale, a recetar aun sabiéndolo, porque saberlo lo saben y si no lo saben deberían ser apartados de la profesión por no saber leer el vademécum.

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