Según la tele de Iñaki IV se puede decir “maricón” pero hay que escribir “m...”

Donde se demuestra que el papanatismo homófilo de lo correcto de los meapilas laicos rojos solidarios de izquierdas tampoco es moco de pavo.

Es viernes, son las 13:10, aunque es público que mi religión me prohíbe ver la tele de Polanco, la ex Plus ahora Cuatro, resulta que en la cocina del adosado en el que tengo alquilada una habitación, mi posadero tiene una televisión en la que no se cogen los canales por cable, por eso alguna que otra vez pongo la Cuatro pero conste en mi descargo y para aliviar la penitencia por mi pecado, que lo hago porque descubrí que a esa hora, algunos días sale mi musa, María Antonia Iglesias, y creo que pecar por algo así no solo es menos pecado sino que podría hasta ser exonerado de cualquier penitencia más. Sigo con lo que me lleva a escribir esto, pues que andaba yo terminando de trajinar mi condumio cuando me llama la atención el contenido de lo que emitía la Cuatro en ese momento, lo que llaman un programa de investigación sobre la prostitución masculina en rotondas, descampados y similares.

Me resultó curioso porque dos minutos antes, al pasar por el Canal 5 estaban emitiendo un programa, supongo que también de investigación, sobre la prostitución femenina en descampados, rotondas y sobre todo en polígonos industriales. Expuesta esa curiosa y extraña coincidencia, debo decir que en la tele de Iñaki, el Savonarola rojo progre solidario de izquierdas especializado en gallumbos suicidas, entrevistaban a un señor, cliente de los prostitutos de la zona, pero sin enseñar su cara.

Este hombre respondía sobre sus gustos y lo que decía iba apareciendo escrito en la parte baja de la pantalla, tal vez porque la mala calidad del sonido pudiese hacerles perder a los televidentes algo de su exposición. Iré poniendo lo que decía el cliente de los servicios de prostitución masculina que por allí se prestaban y lo que aparecía escrito en pantalla sobre sus palabras.

.... pues a mi si me gustan jóvenes, pero también no tan jóvenes, incluso de mi edad, pero eso sí, que no huelan ni a geriátrico ni leches. Yo la higiene.
 
- Texto ( pues a mi si me gustan jóvenes, pero también no tan jóvenes, incluso de mi edad, pero eso sí, que no huelan ni a geriátrico ni leches, yo la higiene)
 
- El otro día, por ejemplo, había allí un maricón, pero maricón, maricón, maricón, vamos maricón que....

- Texto (El otro día, por ejemplo, había allí un m.,, pero m.., m.., m.., vamos m.. que....)

Me quedé medio minuto con la boca abierta. Allí estaba un homosexual que iba a comprarse un desahogo de la libido diciendo maricón varias veces, allí estaban los chicos de Cuatro, intrépidos reporteros ellos que fueron a regodearse en el morbo de ese sector económico proletarizado y asilvestrado y que emitían al señor repitiendo no se cuantas veces la palabra maricón, pero ellos, buenos progres no homófobos, impolutos seres que hacen siempre lo progresistamente correcto y seguro habrán recibido la llamada de muchos miembros del lobby gay, incluida la de Zerolo, pues bien, estos buenos reporteros, mientras un hombre dice maricón, maricón, maricón, maricón ellos trascriben m.., m.., m.., m.., no me partí de risa porque aun no había comido.

Yo ya sé, sin que me lo tengan que demostrar, que los chicos y chicas de Cuatro no son homófobos, pero mi gran duda es ¿el homosexual que dijo tantas veces maricón es homófobo?. Como duda no está mal. Otra cosa que tengo muy clarita es que para muchos de mis progres, a los que tanto quiero y que un poco me leen, yo si soy un homófobo de tomo y lomo por decir maricón. ¡Ay señor que cruz!

Ultima duda, si ganan los socialistas y aprueban la ley contra la homofobia que llevan incluida en su programa electoral, ¿incluirán como un eximente en el delito de homofobia el hecho de ser homosexual?