La enfermiza querencia de El País por la bandera preconstitucional.
Hay manifestación convocada por no progres para tal hora de tal día en tal sitio, en la redacción de El País, la Cuatro y la Ser se convoca reunión de planificación para informar del evento. Se imparten instrucciones, siempre las mismas, o venís con fotos o imágenes de manifestantes portando la bandera preconstitucional o por aquí no volváis. Y allá que van cámaras, fotógrafos y reporteros de la radio a la caza y captura de la bandera preconstitucional. Tras mucho dar vueltas dan con un anciano que lleva una bandera de las de antes, vamos, de las de tiempos del dictador Franco y lo convierten en estrella mediática, ya pueden respirar tranquilos los chicos periodistas progres de izquierdas porque han cumplido su sagrada misión de ensalzar la bandera preconstitucional y colocarla en un lugar de honor de su periódico o informativo. Y a esperar a otra manifa de los retros extremoderechistas del PP o de la AVT o de eso de Ermua.
Ese enfermizo y malsano apego de las tropas del panzer insignia de la división mediática progre Das Reich deberían hacérselo mirar y a lo mejor con un par de frascos de pastillas rojas se les curaba.
Hoy El País, en un precioso artículo sobre el desfile del día de la Fiesta Nacional titulado “Banderas hasta la bandera” en el que resalta este comentario.
“Símbolos franquistas
No eran muchos pero se les veía bien. Grupos dispersos de asistentes al desfile portaban banderas preconstitucionales”
Pues bien, la dichosa fijación de los chicos de PRISA por la bandera preconstitucional les lleva a decir que “el Paseo de la Castellena estaba de banderas hasta la bandera”, por otro lado nos informan con seriedad y veracidad de que los símbolos franquistas no eran muchos, y a pesar de ello, de dedicarles mucho espacio a esos símbolos escasos, la foto que sacan con el artículo es de las dichosas banderas preconstitucionales, no de otras, y es porque las banderas constitucionales que fueron la inmensa mayoría no les merecen el menor interés ya que son altamente alergénicas para la progresía.
Estos periodistas progres están convencidos de que tienen una misión casi divina que cumplir, alertar a la nación sobre el peligro de la extrema derecha, que para ellos es todo lo que no es socialista progre rojo solidario de izquierdas multicultural, que son tan perversos, malvados, pérfidos y maléficos que salen a las calles, que solo a ellos pertenecen, portando valores e insignias preconstitucionales y franquistas. Pero son tan burros, con perdón para los burros, que ellos mismos se ridiculizan al informar de la escasa relevancia callejera del hecho que no tiene relación con la grandísima relevancia que le dan al hecho en sus páginas, haciendo que se les vea el plumero rojo.
Esta malsana querencia de El País por la bandera de tiempos de Franco igual es debida a que su jefe máximo o casi, Juan Luis Cebrián echa de menos los tiempos en que trabajaba para el dictador como jefe de los informativos de la televisión de la dictadura, será eso.
Ese enfermizo y malsano apego de las tropas del panzer insignia de la división mediática progre Das Reich deberían hacérselo mirar y a lo mejor con un par de frascos de pastillas rojas se les curaba.
Hoy El País, en un precioso artículo sobre el desfile del día de la Fiesta Nacional titulado “Banderas hasta la bandera” en el que resalta este comentario.
“Símbolos franquistas
No eran muchos pero se les veía bien. Grupos dispersos de asistentes al desfile portaban banderas preconstitucionales”
Pues bien, la dichosa fijación de los chicos de PRISA por la bandera preconstitucional les lleva a decir que “el Paseo de la Castellena estaba de banderas hasta la bandera”, por otro lado nos informan con seriedad y veracidad de que los símbolos franquistas no eran muchos, y a pesar de ello, de dedicarles mucho espacio a esos símbolos escasos, la foto que sacan con el artículo es de las dichosas banderas preconstitucionales, no de otras, y es porque las banderas constitucionales que fueron la inmensa mayoría no les merecen el menor interés ya que son altamente alergénicas para la progresía.
Estos periodistas progres están convencidos de que tienen una misión casi divina que cumplir, alertar a la nación sobre el peligro de la extrema derecha, que para ellos es todo lo que no es socialista progre rojo solidario de izquierdas multicultural, que son tan perversos, malvados, pérfidos y maléficos que salen a las calles, que solo a ellos pertenecen, portando valores e insignias preconstitucionales y franquistas. Pero son tan burros, con perdón para los burros, que ellos mismos se ridiculizan al informar de la escasa relevancia callejera del hecho que no tiene relación con la grandísima relevancia que le dan al hecho en sus páginas, haciendo que se les vea el plumero rojo.
Esta malsana querencia de El País por la bandera de tiempos de Franco igual es debida a que su jefe máximo o casi, Juan Luis Cebrián echa de menos los tiempos en que trabajaba para el dictador como jefe de los informativos de la televisión de la dictadura, será eso.
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