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Sahumerios y arrebatos

Zapatero, el más rompedor de la democracia.

No lo digo yo, lo dice su nuevo periódico de cabecera, de corazón y hasta de pulmón, el diario Público. Termina el año y nada como agradecer uno a su gran hacedor sus desvelos y hechos a favor. Para ello nada mejor que un ditirambo con gran loa y alabanza que le haga el mejor de la democracia. La progresía roja de ZP requería ponerlo primero en un ranking que fuese lo más de lo más, y los chicos de Público se pusieron a ello y le han nombrado como el presidente del gobierno más rompedor de la democracia, casi ná.

Tras leer el alabancioso y ditirámbico título, que le convierte en Zapatero I El Rompedor, me he parado a pensar en sus méritos y debo reconocer que los tiene y que no voy a criticar semejante arrebato hiperbólico y lo voy a demostrar.

Zapatero, tras ganar las elecciones bajo mínimos, rompió aguas con una naturalidad fuera de lo común y el parto del gobierno rompió moldes. Comenzó rompiendo una lanza por la igualdad nombrando más ministras que ministros, a cuál de ellas más rompedora. Para poder ser investido tuvo que negociar cosa que inicio rompiendo el hielo utilizando el más poderoso rompehielos de la democracia, el cheque presupuestario, dando millones a diestro y siniestro. Siguió magnánimo no rompiendo hostilidades con la Iglesia, como había prometido que haría.

Continuó rompiendo hostilidades con ETA, algo meritorio per se. Posteriormente rompió muchas más cosas, rompió el bienestar de cientos de miles de ciudadanos a los que gracias a sus esfuerzos mandó al paro. Rompió sus promesas electorales a poco de comenzar su gobernanza, dejando hecho unos zorros su pleno empleo, bueno en parte porque él sigue plenamente empleado.

Ha roto muchas ilusiones con sus mentiras, la rotura más cercana la de las ilusiones que Iñaki Gabilondo tenía puestas en él, por el que tanto hizo para que ganase las elecciones del post 11M.

Ha roto muchos corazones, y no por enamoramientos, sino de dolor, cada parado un corazón roto. Rompedor como ninguno este Zapatero. Pero sin embargo jamás se ha roto la cabeza intentando solucionar los daños de la crisis tal vez porque jamás nunca se ha roto los codos estudiando economía, como mucho una tarde y media y es bastante.

Yo solo espero y deseo que los españoles no echemos en saco roto la roturas que ha hecho Zapatero. En resumen, Público acierta porque Zapatero es el presidente más rompedor de la democracia porque es el que más rotos y descosidos ha producido a su país en la democracia. Lo triste es que los platos rotos de este hombre los tenemos que pagar los demás.

Zapatero I El Rompedor, te deseo lo mejor y lo mejor es que los Reyes Magos (laicos, evidentemente) te pongan dos quintales de agujas e hilos y unos cuantos millones de tubitos de superglue.

Documentación.

Público. El Gabinete más rompedor de la democracia

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