El País abusa del acojonamiento climático, la mentira y la estigmatización.
El gran timo del cambio climático, con acojonamiento global y enriquecimiento chungo de miles de truhanes, prospera tanto porque tiene unos cimientos sólidos a pesar de ser harto espurios. Estos cimientos están conformados por cuatro pilares, el científico, el mediático, el político y el papanatismo universal que sustenta a los otros tres.
El pilar científico viene caracterizado, entre otras cosas, por una desvergonzada selección de casos favorables y exclusión de cualquier prueba en contrario, véase el caso de establecer que cuando sube el CO2 en la atmósfera sube después la temperatura, olvidando que a lo largo de la historia del planeta siempre ha ocurrido lo contrario, que primero sube la temperatura y después la concentración de CO2 en la atmósfera.
El segundo pilar es el mediático, dedicado en cuerpo y alma a publicitar la perversidad de quienes se empeñan en matar el planeta porque tiran mucho CO2. Para ello se especializan en la mentira (véase la noticia sobre la desaparición bajo las aguas de las islas Kiribati que aun están ahí). Utilizan desaforadamente la exageración, como el hecho reiterado de convertir en 10 o más metros los 47 cm. que según el IPPC puede que sea probable que ocurra si sucede que el nivel del mar suba a finales del presente siglo. Otra de las armas que utilizan los medios, como en el pilar científico, es la selección de casos favorables, véanse las noticias sobre las subidas de temperaturas y la ausencia de cualquier noticia sobre bajadas de temperaturas globales, o de cualquier deshielo fuera de lo normal pero jamás del incremento de la superficie helada en la zona antártica. Usan también un arma súper acojonante, la estigmatización social de todo aquel que no trague con el timo climático.
El tercer pilar es el político. El ejemplo más claro es el de nuestro presidente Zapatero, que pilló el solito la idea de que andar de minisuperman salvando el planeta da votos y es súper rentable políticamente el disponer de una amenaza externa, y para todo político no hay amenaza más externa que el acojonador cambio climático.
El cuarto pilar, que sustenta a los otros tres, es el papanatismo planetario engullidor ferviente de ruedas de molino adobadas y sin adobar y pagano en este tinglado.
Hoy tenemos en El País un ejemplo de la mentira climática utilizada para estigmatizar a Aznar, cosa por otro lado convertida ya en lugar común. A este hombre cuando no lo estigmatizan lo utilizan como coartada de todas las fechorías socialistas modernas. Hoy le toca ser un negacionista climático de tomo y lomo y para ello nada mejor que aplicarle como hierros al rojo las aviesas técnicas de los chicos de Prisa, en concreto la muy sutil de poner en primera un titular a un artículo que luego no aparece por ningún lado en el cuerpo del mismo.
El País publica en primera un artículo que titula “Aznar duda el cambio climático
“. Si usted quiere ver en su plenitud la técnica aviesa de El País lea el artículo y abúrrase buscando donde sale Aznar diciendo que duda del cambio climático. No lo verá porque no hay tal. Habla de que FAES, la cosa esa rarilla que al parecer dirige Aznar va a publicar un libro de Valclav Klaus. Este hombre no niega el cambio climático, porque es de imbéciles negar lo que ha ocurrido todos los días en este planeta desde que hay clima, sino que niega que sus orígenes sean los que proponen los timadores climáticos. Miren lo que dice este hombre y vean las mentiras de El País sobre lo que dice.
“ ¿Es el calentamiento global una realidad?; si es una realidad, ¿es culpa del hombre?; si es así, ¿es un problema?; ¿vivirán mejor o peor los ciudadanos del mundo porque haya pequeños incrementos en la temperatura global?; si es una realidad, y no es un problema, ¿puede el hombre detener el proceso?, ¿puede cualquier análisis razonable sobre el coste-beneficio justificar cualquier cosa, que se puede hacer ahora? Podemos decir sí con algún grado de probabilidad sólo a la primera pregunta. Para otras, mi respuesta es no”.
Observen que dice que para él si es una realidad con algún grado de probabilidad el que haya calentamiento global y por tanto cambio climático. Eso le sirve a los estigmatizadores climáticos para decir que porque Aznar vaya a presentar el libro ya duda del cambio climático, estos mendaces incluso subtitulan “ Un libro publicado por FAES afirma que el calentamiento es un mito”.
Lo único que queda claro que hace el autor del libro es no aceptar el timo climático del calentamiento global y su pretensión de que está originado por la actividad humana y no acepta que podamos, eso si ni siquiera soltando mucha, pero mucha mucha pasta, arreglarlo y salvar el planeta.
Cuando alguien miente tan descaradamente como El País sobre algo solo significa una cosa, que lo que defiende es mentira, ya que si fuese verdad no necesitaría mentir en apoyo de su tesis. Pero como hay que estigmatizar y demonizar a quienes no tragan, se les acusa con mentiras de negar una evidencia, que el clima del planeta cambia, cuando hasta el menos enterado sabe que está cambiando todos los días desde que el mundo es mundo.
Hasta yo vengo sosteniendo que el cambio climático es tan normal en la tierra como la humedad en el agua. No obstante reconozco que para sostener una martingala del calibre del timo climático solo es factible con el concurso de muchos medios de comunicación, y qué menos que tener al diario global de adalid del acojonamiento climático global.
3 comentarios
alatriste33 -
AZNAR COLOCO UN NUEVO MINISTERIO EL DE MEDIOAMBIENTE Y COLOCO
EN ESA CARTERA A ISABEL TOCINO.. Y APROBO EL PROTOCOLO KYOTO EN 1997
Anónimo -
Si, aquí cuelgo lo mismo que ponía en Debate 21, solo que al ser este mi blog también cuelgo otras cosas además de.
Gracias por tus palabras y por leerme.
Un cordial saludo
Orel
Javal -
Permíteme Orel una cuestión personal. Seguía tus artículos y otros, desde el enlace de Debate 21, que ha cerrado. ¿Publicas aquí, todos tus artículos y los enlazabas en Debate21, o son diferentes? Como ya te dije en otra ocasión me gusta lo que escribes y me encanta el tono irónico y certero de tus comentarios.