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Sahumerios y arrebatos

Beneficios e injusticias de la ley antitabaco.

Esta manía que tienen quienes han hecho de la prohibición una de sus formas preferidas de orgasmar nos ha traído hoy una excelente herramienta de protesta contra Zapatero, el cigarrillo reivindicativo puede que se ponga de moda y en lugar de caceroladas me huelo que este año será el del fumeteo protesta.

No estaría de más que alguien convocase una concentración de fumadores ante las puertas de la Moncloa para ahumar al primer incumplidor de la ley antitabaco, pues es de todos conocido que ZP fuma en su lugar de trabajo y le trae al pairo la ley y sus admoniciones.

Otro posible método para saltarse la oprobiosa prohibición con desgravaciones fiscales sería crear una nueva secta religiosa que integrase en sus actos litúrgicos de alabanzas a su dios el fumar, el beber y el comer. Los fieles de la iglesia de la divina humareda podrían tener sus templos en antiguos bares, de los que cerrarán y programar sus horarios de culto durante las 24 horas del día, al pasar el cepillo se recaudaría lo suficiente para sufragar los gastos.

Otra utilidad de la nueva ley es la de servir de herramienta para la venganza. Si usted tiene problemas con fulanito, quiere vengarse de algún agravio y el tal fulanito tiene un bar, basta que mande a alguien a quien fulanito no conozca, que se fume un pitillo en el bar, que alguien ponga una reclamación y le clavan a fulanito 100.000 euros de multa, al fumador tan solo 30 euros y eso si da el nombre.

El sistema anterior también puede servir para ahorrarse el tener que pagar, basta sacar un paquete de tabaco a la hora de pagar y decirle al del bar que a cambio de ahorrarle 100.000 euros de multa él debería ahorrarle a usted la cuenta.

Personalmente sigo exigiendo que dado que los humos del tabaco son perjudiciales para la salud y por eso se prohíben, que se prohíban los humos de los coches de todos los que me joden a mí los pulmones, aquí o todos tiramos humos malsanos o que no los tire nadie.

Y no digo nada del venenoso CO2 que expelen todos los no fumadores y que nos tragamos los fumadores, ¿eso no cuenta?

Y si hablamos de las multas, ahí sí que se le ve el plumero a la sin par Leire Pajín y su mandamenos ZP, o sea que si alguien fuma en un bar, van y multan al dueño con 100.000 euros, pero no pasa lo mismo si pillan fumando a alguien en una iglesia, en la escalera de una comunidad de vecinos, en un hospital, en un pabellón de deportes cubierto o en el mismísimo Congreso de los Diputados. ¿A qué tanta ojeriza contra los dueños de los bares?

¿Por qué no multan a doña Leire Pajín si pillan a alguien fumando a escondidas en su ministerio?, debe ser porque dona Leire tiene bula o es mejor que Paco el pipa, dueño del bar La Jarana.

Hoy haré mi primera manifa protesta contra la oprobiosa, injusta y no igualitaria prohibición fumándome un pitillo en un lugar prohibido y pagando gustoso los 30 euros de multa si me pillan.

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