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Sahumerios y arrebatos

¡Hosanna!, El País loa a Rajoy por su invectiva contra ZP

El PP está exultante, por fin lo han conseguido, les ha costado renunciar a mucho, han tenido que travestirse hasta parecer casi progres, le han dorado la píldora incluso a las becarias de El País, han realizado genuflexos la peregrinación a su Canosa penitencial, vulgo la SER y todo ello ha dado como resultado que entre tropecientas páginas de El País en las que les ponen a caldo, y un mogollón de horas en la SER en las que les ponen de chupa de dómine,  el editorial de hoy del depositario agujereado de las esencias del progresismo alaba y loa a Rajoy por una de sus invectivas a Zapatero en la coporeización que el presidente hizo ayer en el Congreso para decirnos que hay paro pero que el no ha sido.

Esta mañana alguien ha dicho que al pasar por delante de la sede del PP en la calle Génova se oían extraños jadeos y grititos, que si no fuera porque es imposible dice que diría que se trataba de las resultantes de un orgasmo colectivo. Otras fuentes que prefieren permanecer en el anonimato informan que en todos los kioscos existentes en un radio de 23 manzanas de la calle Génova se habían agotado todos los ejemplares de El País e insisten que han visto a varias personas entrar cargadas de periódicos en la sede del PP. Expertos pepelólogos explican el extraño fenómeno, Arriola habría ordenado recortar el editorial de 1.000 ejemplares de El País y enmarcarlos para darle en los morros a todos lo que digan a partir de ahora que la política de aproximación al progresismo, es suicida y que nunca recibirán otra cosa que no sean estacazos y vituperios del PSOE y de PRISA.

En el editorial que El País titula sin ningún talante constructivo como “Debate entre tinieblas”, aparece el párrafo que ha hecho que Rajoy y sus directivos lanzasen un estentóreo “¡Por fin!”.

También quedó claro que el Gobierno no gestiona bien sus propias decisiones. Una de las contadas oportunidades en las que el líder de la oposición, Mariano Rajoy, superó su huero catastrofismo fue cuando denunció el desorden de las medidas económicas. Tiene razón: el Gobierno debería estar preocupado por el seguimiento y rentabilidad de las medidas que toma. No hay constancia de esa preocupación.

Para El País estamos en tiempo de tinieblas, y aunque acuse a Rajoy de catastrofista huero y luego le haga un ditirambo, yo acepto lo que dicen los futuros ideólogos prisáicos del PP y no es nada catastrofista. Esto va camino de que las tinieblas de Zapatero las convierta ZP en opoca negrura plena de lóbrega tenebrosidad.

Para finalizar, contragularme por mi propia perspicacia, ya que antes de comenzar el debate me dije a mí mismo que ZP en resumen diría “Yo no he sido, ha sido ese, eso, aquello y aquel de allá además del PP”, y lo clavé. Bueno,  he mentido, no soy perspicaz por haber pensado eso, hasta un niño de teta lo habría predicho.

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