Blogia
Sahumerios y arrebatos

Me esfuerzo pero no pillo lo de la Alianza de Civilizaciones.

Reconozco que debe ser culpa mía, puede que mi incapacidad para captar la esencia del intríngulis de la Alianza de Civilizaciones sea resultado de mi insolvencia intelectual para entender cosas que en sí seguramente son tan simples que hasta un niño de 4 años las entiende. He pensado hacer lo mismo que Groucho Marx, buscarme un niño de 4 años que me lo explique, pero antes de recurrir a semejante medida he optado por irme a documentar e instruirme al respecto en las fuentes del saber sobre alianzas de civilizaciones y me refiero al programa electoral del PSOE. Quiero dejar bien claro que esta búsqueda de conocimiento no es el cumplimiento de ninguna penitencia ni autoflagelación mental.

Me voy muy de mañana a la página web del PSOE y localizo fácilmente el programa electoral de Zapatero, me desplazo hasta la página 285 y me dedico un rato muy muy largo a lo de captar los fundamentos esenciales del busilis de la alianza.

Leo que la Alianza de Civilizaciones es la apuesta de Zapatero por una globalización justa. Esto aunque parezca que no me queda claro pues no se que puñetas es una globalización justa, capto que es un concepto precioso y por eso no seré yo quien diga que no sé que puñetas significa, sería algo indecoroso manifestar tamaña incultura e insensibilidad.

Lo segundo que leo me emociona, lo juro, pues resulta que el objetivo sustancial de la Alianza es el de promover el consenso intercultural. Y claro eso del consenso intercultural me ha impelido esta mañana a salir a la calle y buscar a una persona de otra cultura, la he encontrado y hemos llegado a un consenso y soy feliz. No me pregunten como hemos llegado al consenso ni cuanto tiempo nos ha llevado llegar a él, pero si puedo decir que el consenso ha consistido en ponernos de acuerdo, he invitado a Alejandro Washington, un ecuatoriano que trabaja de camarero en el bar al que he ido y hemos consensuado que sería a café con leche. El segundo objetivo de mi vida, después de conseguir que mis hijos se emancipen titulados será a partir de ahora la búsqueda del consenso intercultural.

Zapatero expone en su programa  a continuación:

“Frente a las fuerzas conservadoras que preconizan un mundo culturalmente enfrentado, los y las socialistas creemos que la Alianza de Civilizaciones impulsa una concepción radicalmente diferentes de nuestro planeta, que concibe las relaciones sociales entre distintas culturas no como una fuente de conflicto, sino como una fuente de riqueza basada en la construcción del diálogo, la convivencia pacífica y los idearios compartidos entre ciudadanos y ciudadanas y comunidades de procedencia cultural diversa”

Eso de enterarme yo esta mañana de que las fuerzas conservadoras preconizan un mundo culturalmente enfrentado me ha quitado el sueño y por eso no me he vuelto a acostar. Pero ¡qué perfidia la de los conservadores!, estaba yo a un paso del llanto cuando leo alborozado que los y las socialistas y socialistos tienen una concepción diferente de nuestro planeta.

Reconozco que la alegría del alborozo ha ido acompañada por una carcajada que ha hecho que mi vecina se asomase a la ventana y solo por eso ya ha podido saborear las bondades de la Alianza de Civilizaciones. Es que he pensado que si Zapatero y los y las socialistas y socialistos tienen una concepción diferente de nuestro planeta igual es que han descubierto que no es esférico el planeta sino con forma de pera limonera o de piña en almíbar y en rodajas o vaya usted a saber, y si quiero conocer esa concepción diferente de nuestro planeta.

Termino quitándome el sombrero ante Zapatero porque aquí y sin coñas irónicas si que diré que estoy con él, yo que aspiro a llegar a intentar ser mujeriego erudito, el que diga eso de “
los idearios compartidos entre ciudadanos y ciudadanas” le da un nuevo objetivo a mi vida, a partir de ahora iré por la vida compartiendo mi ideario con ciudadanas que se presten a ello y espero que Zapatero me ayude en la tarea de encontrar ciudadanas que quieran compartir su ideario conmigo.

Confieso que si llego a conocer antes de las elecciones que Zapatero proponía como objetivo de su gobierno lo de poder compartir idearios entre ciudadanos y ciudadanas le habría votado sin dudarlo, es lo que tiene no leerse los programas electorales ni el que esas cosas no las digan en los mítines y debates.

Me ha sobrevenido intempestivamente una brillante idea al pensar para que pueden valer los programas electorales una vez terminado el proceso electoral se me ha ocurrido a mi solito que se pueden utilizar como herramienta tanto de castigo como de rehabilitación social, familiar o similar. Alguien hace algo mal, piensen que maravilla, se le castiga a leerse el programa electoral del PSOE y el del PP. Si ya es un delito se le condena a hacer un resumen.

0 comentarios