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Sahumerios y arrebatos

El País patea las esencias presupuestarias de Zapatero.

Sigue el berrinche inconsolable del imperio del dios Polanco por la denominada segunda guerra del fútbol. El pifostio que alegra los corazones de quienes lo vemos desde las gradas del sector no progre continúa más acentuado cada vez, el fuego amigo se esta convirtiendo a cada día que pasa en tiros con muy mala leche. El ataque de cuernos de Prisa por ver a Zapatero en la cama de la Sexta Mediapro tiene visos de degenerar en guerra sucia, que ojalá llegue pronto por aquello de que el que nos alegren el día los chicos de Prisa no es gracia que se nos conceda habitualmente. Se está cumpliendo a rajatabla la que yo llamo Ley de la pataleta progre : “La virulencia de los ataques editoriales de El País contra Zapatero es directamente proporcional al número de partidos que emite en abierto la Sexta e inversamente proporcional al número de arrumacos de Zapatero hacia PRISA.”

Se me nota que estoy disfrutando con el espectáculo, e intento aprovechar el intercambio de golpes porque igual mañana se ponen de acuerdo y se nos acaba el chollo de este jolgorio.

Mañana se televisa un partido del Barsa en abierto en la Sexta, partido que tiene anunciado la cosa esa digital de Polanco. El hecho hace que se tiren de los pelos los próximamente ex representantes mediáticos de la izquierda en el gobierno y siguiendo el viejo principio de acción reacción hoy le dan una bonita patada a Zapatero en sus hígados presupuestarios.

El editorial tipo trompazo con patada a seguir de hoy en El País se titula “Con la mancha electoral” ahí es nada. Se refiere a que los presupuestos recién aprobados llevan la mancha electoral y eso lo explican en la última frase que también pasará a los libros de historia.

La segunda objeción es que en las últimas semanas el electoralismo ha hecho presa del cálculo presupuestario. Y eso arruina la seriedad de las finanzas públicas.

Que nuestra sin par vicepresidenta del enorme fondo de armario, de la Vega, se desgañite como solo ella sabe desgañitarse diciendo que no solo no son electoralistas los presupuestos sino que lo electoralista es prometer algo y no cumplirlo, y luego vengan los teólogos oficiales de la religión progresista solidaria y multicultural roja de izquierdas y digan que la vice miente porque son muy electoralistas los presupuestos de Zapatero, debe haberle sentado como una patada en los higadillos.

Lo raro del ataque de cuernos de El País es que se rebotan por que Zapatero ande tonteando y haciendo manitas con la Sexta Mediapro y sin embargo ni se molestan en quejarse porque su amado presidente haya prometido volver a encamarse con la ETA. Pero así es el amor, carente de lógica.

Ante el regocijante tiberio progre yo solo les digo: No paren, sigan, sigan.

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